El pasado lunes 1° de junio, jornada en la que se casualmente se celebra todos los años el Día Internacional de la Leche, se llevó a cabo la segunda de las “reuniones digitales”, más concretamente la de cierre, promovidas en el marco del “Primer Concurso Virtual de para Pequeños Productores de Quesos Artesanales del Valle de Trancas”, actividad coorganizada por miembros del Centro de Referencia para Lactobacilos (CERELA, CONICET).
Si bien este año la actividad adoptó una nueva modalidad –la de conexión virtual- debido a la coyuntura, se trata de una iniciativa que ya tiene una reconocida trayectoria en la provincia, y cuyas ediciones anteriores se desarrollaron en el marco de la Expo Láctea del Norte. Con lo cual, la situación atípica ocasionada por la pandemia, no resultó un impedimento para que 12 pequeños productores del departamento de Trancas se postularan para participar del concurso vehiculizado además por otras tres instituciones: la Dirección de Alimentos, dependiente del Ministerio de Desarrollo Productivo de la provincia; la Municipalidad de Trancas, y la Fundación para el Desarrollo de Tucumán.
La actividad constó de tres etapas: una primera de admisión de requisitos, a través de un formulario online de inscripción que los productores debieron completar para participar; una segunda etapa de admisión de aptitud microbiológica de los productos, que consistió en análisis realizados en el Laboratorio de Control de Calidad Frutihortícola dependiente de la Dirección de Alimentos; y una tercera instancia de evaluación sensorial de los quesos seleccionados a cargo de un grupo selecto de jurados, entre los cuales se destacan profesionales del CERELA.
De la docena de inscriptos iniciales, solamente cuatro de ellos cumplieron con los estándares solicitados. Las muestras de quesos finalistas se entregaron en el domicilio de cada jurado-evaluador, para posteriormente proceder con la prueba sensorial que se concretó el jueves 28 de mayo en un primer encuentro virtual. Durante esta reunión, los integrantes del comité evaluador completaron una planilla online poniendo énfasis en ciertos atributos de calidad para su devolución, tales como apariencia (externa e interna), sabor, aroma (flavor) y textura.
Cabe destacar que el proceso fue moderado por un profesional del CERELA, el licenciado Mariano Obregozo, quien oficializó como veedor, y que además, el jurado estuvo conformado por diferentes personalidades destacadas, como la de la conductora del programa televisivo Con Mucho Picante, Miriam Brizuela; del Secretario de Estado de Desarrollo Productivo, licenciado Juan Blasco; del Presidente de la Federación Económica de Tucumán, Alberto Guardia; también fiscalizó el Chef del periódico La Gaceta, Maximiliano Cáceres Cano; y el Mejor Jurado del concurso de la Expo Láctea 2019, doctor Emanuel Fabersani, miembro del Laboratorio de Calidad de Lácteos y Alimentos Funcionales (FAZ, UNT).
Durante la tarde del lunes, mediante la segunda y última interacción virtual, se realizó la premiación en la que participaron los productores finalistas, los miembros del jurado y las autoridades y representantes de las instituciones organizadoras, con la distinguida presencia de la Directora del CERELA, doctora Adriana Beatriz Perez Chaia, quien dirigió unas palabras alusivas de agradecimiento y felicitaciones a los intervinientes.
Lucía Pasayo resultó como la ganadora del concurso, logro por el cual se le otorgó un premio en efectivo de $10.000 pesos entregados por la municipalidad Trancas y la Fundación para el Desarrollo de Tucumán. No obstante, en este concurso no hubo perdedores: el resto de los finalistas recibirán asesoramiento técnico personalizado mediante reuniones virtuales ofrecidas por CERELA y una bonificación de la renovación de la credencial de Buenas Prácticas de Manufactura, amortizado por la Municipalidad de Trancas.
Para Obregozo, Personal de Apoyo del CERELA, uno de los organizadores e impulsores de estos certámenes junto con doctora Martha Nuñez, también CPA del Instituto, la propuesta “sirvió de estímulo para el fortalecimiento del sector quesero artesanal, ya que se producen con requerimientos de calidad, promoviendo la inclusión de alimentos con identidad, seguros, nutritivos y saludables como una alternativa de desarrollo socio-económico para la región”.