Comenzará a funcionar el primer Microscopio de Fuerza Atómica de Santiago del Estero

Recientemente, el Instituto Multidisciplinario de Salud, Tecnología y Desarrollo (IMSaTeD, CONICET-UNSE) incorporó una herramienta esencial para la investigación científico-tecnológica debido a su versatilidad y capacidad para obtener imágenes y medir propiedades en dimensiones minúsculas: el Microscopio de Fuerza Atómica (AFM, por sus siglas en inglés), de la marca Nanosurf y cuyo modelo es el DriveAFM.

Se trata de un equipo de última generación que estará a disposición para el uso de la comunidad científica a partir del mes de noviembre, y que servirá para el avance de estudios moleculares de estructuras a escala nanométrica, es decir, con la capacidad de analizar muestras que equivalen a la milmillonésima parte de un metro.

Financiado por el proyecto Equipar Ciencia II del CONICET, el AFM no sólo funciona como microscopio de fuerza atómica, sino también como Microscopio de Efecto Túnel (STM) -lo que amplía significativamente sus potencialidades de investigación- y como Microscopio de Sonda de Barrido (SPM) que, gracias a su sistema de control de barrido de 1 MHz de ancho de banda, permite la realización de diversos experimentos de espectroscopía. Además, puede operar en aire, en un medio líquido o con atmósfera controlada, facilitando estudios en distintas condiciones ambientales.

Lo más importante de este aparato único en Santiago del Estero y uno de los pocos del país es su capacidad para explorar y comprender fenómenos fundamentales en diversas áreas de estudio, ya que se puede aplicar a la investigación de superficies para análisis topográficos con una resolución nanométrica; para la manipulación y caracterización de nanomateriales; y, en biología y medicina para investigar estructuras biológicas como proteínas y células. Asimismo, puede emplearse en la ciencia de materiales para determinar propiedades mecánicas, eléctricas y magnéticas; en electrónica y semiconductores para la inspección de circuitos y componentes; y en el medio ambiente para identificar contaminantes y observar la interacción entre nanopartículas.

La puesta en funcionamiento del AFM representa un significativo avance tecnológico, y va a posiciona al IMSaTeD como un centro científico de vanguardia para la investigación de estructuras a nivel molecular en la región NOA, destaca Carlos Peralta, ingeniero instalador y agente de la compañía Zeiss.