CIENCIAS EXACTAS Y NATURALES

Desarrollan bebidas a partir de compuestos naturales para controlar la obesidad y la diabetes

Sobre la base de extractos de cultivos nativos del NOA como la jarilla y el chilto, especialistas del CONICET NOA Sur en Tucumán elaboran refrescos saludables que se caracterizan por sus propiedades antioxidantes, antiinflamatorias, hipoglucemiantes y cardioprotectoras.  


Desarrollan bebidas a partir de compuestos naturales para controlar la obesidad y la diabetes
Izq a Der: Florencia Correa Uriburu, María Inés Isla y Catiana Zampini.
Desarrollan bebidas a partir de compuestos naturales para controlar la obesidad y la diabetes
Desarrollan bebidas a partir de compuestos naturales para controlar la obesidad y la diabetes
Desarrollan bebidas a partir de compuestos naturales para controlar la obesidad y la diabetes
Desarrollan bebidas a partir de compuestos naturales para controlar la obesidad y la diabetes

El noroeste argentino es una fuente inagotable de riquezas naturales, con diversas especies vegetales que se caracterizan por sus propiedades benéficas para la salud humana. En este contexto entra en juego la ciencia, que pone énfasis en el estudio de esas potencialidades –en muchos casos desconocidas hasta ahora- de plantas nativas como la jarilla y el chilto, este último también conocido como tomate de árbol.

Cultivos como los mencionados son de particular interés por sus atributos antioxidantes, antiinflamatorios, hipoglucemiantes y cardioprotectores, que fueron desentrañados tras años de estudio por las investigadoras María Inés Isla y Catiana Zampini, y por la becaria postdoctoral, Florencia Correa Uriburu, quienes lograron importantes avances en el área al igual que otros miembros que comparten el mismo lugar de trabajo: el Instituto de Bioprospección y Fisiología Vegetal (INBIOFIV, CONICET–UNT), con sede en la provincia de Tucumán.

En conjunto con colegas del Instituto de Investigación y Desarrollo en Ingeniería de Procesos, Biotecnología y Energías Alternativas (PROBIEN, CONICET-UNComa) y del INTA-Famaillá, las especialistas del INBIOFIV están detrás del desarrollo de una bebida funcional -en polvo para disolver- que contiene todas las ventajas mencionadas, a raíz de que fue formulada con extractos de la jarilla y el chilto, y de otros dos compuestos: el arándano, que no sólo refuerza el perfil antioxidante del producto, sino que además le confiere un sabor más agradable; y miel natural de azahar de limón, que ayuda a equilibrar el sabor sin la necesidad de acudir a la implementación de azucares refinados.

Este desarrollo del alto poder antioxidante, con acción antiinflamatoria e importante capacidad para ayudar a reducir el azúcar en sangre, los niveles de colesterol y la presión arterial, se presenta como una alternativa natural a medicamentos comerciales para favorecer a la prevención de enfermedades crónicas no transmisibles tales como la obesidad y la diabetes, entre otras, a partir del aprovechamiento de las propiedades de plantas ancestrales del NOA.

 

Aprovechamiento de especies autóctonas

Las especialistas del desarrollo explican que las bebidas están enriquecidas con compuestos fenólicos naturales -sustancias químicas producidas por las plantas- y cuentan con propiedades antioxidantes, por lo que ayudan a neutralizar los radicales libres, es decir, aquellas moléculas inestables que dañan las células y contribuyen al envejecimiento y la aparición de enfermedades crónicas. Por lo tanto, tienen el objetivo de aportar beneficios en el control del síndrome metabólico, un trastorno que afecta a más del 25% de la población adulta en Argentina y que representa una preocupante tendencia creciente entre niños y adolescentes como consecuencia de la obesidad infantil.

Para su elaboración, incorporaron entonces sustancias derivadas de la jarilla (Zuccagnia punctata), recolectada en los Valles Calchaquíes; del chilto (Solanum betaceum), proveniente de las Yungas de Tucumán; y del arándano, que combinados con miel de azahar de limón como endulzante natural y la aplicación de tecnologías de secado como la liofilización y el secado por spray, con el fin de obtener productos en polvo fáciles de conservar, transportar y consumir, terminaron de dar forma al producto final.

“Fueron rigurosamente caracterizadas desde el punto de vista químico, físico-químico, funcional y sensorial”, explica Isla, directora del INBIOFIV, sobre los estudios realizados que permitieron que la innovación atraviese todas las etapas que demuestran su capacidad. Remarca también que “el valor de estos productos está en la funcionalidad que tienen para la salud, y en el haber hecho uso de especies autóctonas con alto potencial biotecnológico”. Además, señala que sus componentes fueron ensayados en modelos in vivo de síndrome metabólico, demostrando eficacia en la reducción del estrés oxidativo y la mejora de parámetros metabólicos relacionados con la obesidad, la hipertensión y la diabetes tipo 2.

 

Desarrollo regional sostenible

Más allá del impacto en la salud, con lo que todo ello implica, el presente avance también podría generar beneficios económicos y sociales. El uso de especies locales impulsa la valorización de la biodiversidad regional y promueve modelos de producción sostenibles. En ese sentido, en el INBIOFIV se logró optimizar el proceso de micropropagación de jarilla mediante cultivo in vitro, asegurando su aprovechamiento sustentable. En paralelo, se están desarrollando iniciativas para fomentar el cultivo del chilto en diversas zonas del noroeste argentino. Con lo cual, este desarrollo representa una oportunidad para fortalecer las economías regionales a través de la producción y comercialización responsable de alimentos funcionales elaborados a partir de recursos nativos.

El resto del equipo:

Daniela Salvatori y Milagros Gómez Mattson (PROBIEN).

Luis Maldonado, del Grupo de Agroindustrias (INTA Famaillá).