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En el marco de los 15 años del ISES, el vicepresidente del CONICET visitó Tucumán y participó de actividades conmemorativas

Durante dos jornadas, Mario Pecheny formó parte del staff de autoridades que intervinieron en las distintas propuestas e iniciativas para celebrar el aniversario del Instituto Superior de Estudios Sociales.


Segunda parte de la celebración del aniversario del ISES, en el predio del MUNT.

El viernes 10 y el sábado 11 de marzo, en la provincia de Tucumán, se llevaron adelante diferentes acciones para conmemorar el 15° aniversario del Instituto Superior de Estudios Sociales (ISES, CONICET-UNT). En este contexto, importantes funcionarios nacionales y provinciales de ciencia y técnica, y académicos, entre los que se destacó la participación del vicepresidente de Asuntos Científicos del CONICET, Mario Pecheny, fueron parte del agasajo que contó con tres principales sedes.

En la primera de ellas, recientemente inaugurada en la zona sur del microcentro de la provincia del NOA, la flamante directora del ISES, Alejandra Korstanje, comenzó su alocución agradeciendo a las autoridades y al público presente, y luego continuó con una consideración acerca de lo que persiguen como propósito en esta nueva gestión: “queremos un instituto de ciencias sociales y humanas que genere compromiso y acción para el cambio social, haciendo especial referencia a las identidades individuales, sociales y culturales. Pero, además, y parafraseando a diferentes intelectuales, sostuvo que “en un mundo tan ´despiadado´ e injusto, y en el que –tomando como referencia a las instituciones de ciencia y técnica- existen ciertos individualismos, la impronta del ISES va a estar direccionada justamente a fortalecer los lazos entre pares, y por ende a terminar con esa “irrealidad que creemos que el sistema nos impone”.

Asimismo, destacó la generosidad de los investigadores Eduardo Charreau, Ricardo Farías y Faustino Siñeriz –ex autoridades del CONICET-, quienes posibilitaron la constitución del ISES como instituto de doble dependencia entre el CONICET y la Universidad Nacional de Tucumán, en el año 2008.

Por su parte, Atilio Castagnaro, director del CCT NOA Sur celebró el aniversario, e hizo hincapié en la importancia de los institutos de doble dependencia que comparten el CONICET y las universidades nacionales, entre los que se encuentra el ISES. Es decir, en esa “interinstitucionalidad, sumamente virtuosa”, según su perspectiva. “A los que tuvimos la oportunidad de visitar otros países, esto no ocurre ni siquiera en los más desarrollados”, dijo el directivo en referencia, precisamente, a la sostenida interacción entre ambas instituciones estatales, y agregó: “hay que valorar, proteger, cuidar y potenciar este tipo de confluencias en la ´sociedad del conocimiento´; las cuales apuntan a un objetivo conjunto y común: la generación de riqueza, en todos los aspectos”.

Para terminar, Castagnaro habló de la institucionalidad y del rol que cumple, por un lado, el Centro Científico Tecnológico que hoy le toca administrar: “sirve para articular y optimizar los esfuerzos de y entre los institutos, para la producción del conocimiento, y a la vez para ´derrumbar´ todo sentimiento de individualismo entre estos y entre las personas que los conforman”. Son espacios, agregó, “donde se debatan las ideas y los intereses de la manera más democrática posible”. Y por otro, destacó el papel que cumplen las Ciencias Sociales, a las cuales definió como elementales: “la investigación básica es fundamental, pero no es suficiente, y sobre todo para un país como el nuestro. Porque más allá de producir conocimiento disciplinar, el objetivo, en definitiva, es el de mejorar la calidad de vida de la sociedad donde estamos inmersos, y eso no se puede alcanzar sin las ciencias sociales, que son el puente y la herramienta para lograrlo”.

A su turno, la vicerrectora de la UNT, Mercedes Leal, destacó la relevancia de estos quince años del ISES en la producción de saberes sociales, argumentando que, actualmente, las sociedades y el mundo necesitan cada vez más de este tipo de conocimientos. “Debemos erradicar las políticas de odio, de deshermandad y de anticomunidad que en la actualidad imperan, y la única forma es a través de la generación de políticas públicas y universitarias, que apunten a construir unidad, solidaridad y respeto por la diversidad.

Posteriormente se reveló una placa, y los y las asistentes realizaron una caminata protocolar, recorriendo varios espacios y monumentos provinciales hasta llegar a la segunda de las sedes del evento: el Museo de la Universidad Nacional de Tucumán (MUNT). En ese lugar, donde se emplaza asimismo el Instituto de Arqueología y Museo (IAM, UNT) –en cuyo espacio se desempeñan arqueólogos y arqueólogas del CONICET-, Pecheny felicitó a todo el personal del ISES en este nuevo aniversario, y agradeció el esfuerzo que hacen investigadores/as, becarios/as, y los miembros de la Carrera del Personal de Apoyo (CPA) y del ámbito administrativo.

“Junto a Marisa Censabella, directora del Fondo para la Investigación Científica y Tecnológica (FONCYT), vinimos a celebrar estos quince años con los y las colegas, y a dar cuenta de cómo desde las Ciencias Sociales y las Humanidades se puede hacer un aporte sustancial a la comunidad”, dijo el vicepresidente del CONICET.

 

Sábado de disertaciones

¿Quién le teme a las Ciencias Sociales y las Humanidades?, llevo por nombre la actividad del segundo día que completó la agenda de propuestas para celebrar el aniversario institucional. En palabras de Korstanje, la finalidad de este encuentro fue no sólo la de reunirse para llevar a cabo “exposiciones catedráticas”. “Lo más importante fue instar a la elaboración de propuestas concretas y conjuntas sobre problemas que se pueden vislumbrar mejor desde un ámbito de debate, discusión e intercambio de ideas”, señaló la referente. Y por eso es que se eligió la modalidad de talleres para el desarrollo de la actividad.

Asimismo, la investigadora subrayó que la discusión y los debates de los ejes temáticos presentados estuvieron, en una primera instancia, centrados en torno a las bibliotecas de archivos, documentales y no documentales, y en los repositorios: “nos importa la conservación del material, pero también cómo se gestiona y maneja, ya que gracias a este se sostiene la memoria colectiva; que es algo muy importante y muy propio de las ciencias sociales y de las humanidades”, enfatizó la directora.

Sobre esto, Pablo Fontdevila, director del Archivo General de la Nación y también conferencista del encuentro, indicó que en el AGN se encuentran en un proceso de normalización de los fondos documentales que son muy importantes porque reflejan la historia, la memoria y también los derechos que conquistó el pueblo argentino. “Como son objetos de consulta, de investigación, sobre todo por el mundo académico perteneciente al campo de las ciencias sociales, para nosotros también escucharlos a ellos –es decir, a los integrantes del ISES- es muy importante; saber qué falencias encuentran, qué dificultades tienen y qué podemos hacer para mejorar”, expresó.

En un segundo término, Korstanje señaló que el resto de propuestas pusieron en relieve problemáticas más transversales con respecto a áreas de las otras disciplinas. Como, por ejemplo, el rol que las Ciencias Sociales y Humanas desempeñan en proyectos de “transferencia de tecnologías”, o en la construcción, organización, evaluación y comunicación de las “políticas públicas”.

 

El ISES, una institución científica de fuste en el noroeste argentino

Hacia finales de la década del 2000, el contexto de surgimiento del ISES estuvo signado por las políticas de inversión en ciencia y tecnología, especialmente bajo la gestión de Eduardo Charreau, ex presidente del CONICET. En ese sentido, el instituto surgió como resultado de la apuesta por la fundación de Unidades Ejecutoras de doble dependencia, que muestran la potencialidad de la articulación entre el CONICET y las Universidades Nacionales. Esta doble pertenencia constituye uno de los rasgos destacados del ISES, permitiendo su crecimiento institucional y científico en diálogo con las preocupaciones de la comunidad universitaria de Tucumán.

Desde el Inició de su recorrido en 2008, se caracterizó por contar con sustrato dotado de multiplicidad disciplinaria y diversidad temática, aunque con la mirada puesta en un horizonte común, que son los campos del conocimiento social y humano.

En estos 15 años de trayectoria, sus integrantes, en continuo crecimiento, aportaron a la producción conocimiento científico y humanístico, promoviendo la formación de tesistas, becarios y becarias; generando equipos técnicos y de investigación, y concretando acciones compartidas con la sociedad y con otras instituciones del sistema. Además, desde sus comienzos promovió la puesta en valor y la preservación de bienes socioculturales de la región del NOA, y se orientó a comprender el territorio en perspectiva histórica y situada, en un área sociocultural surandina mayor, mediante el desarrollo de campos disciplinares de la Historia Arqueología, Antropología, Geografía, Derecho, Economía, interconectados y atravesados por otras áreas del conocimiento.

En su devenir, se gestaron convenios con organismos de gobierno e instituciones provinciales y nacionales en cuyo marco se dieron investigaciones y acciones de impacto social y científico. La producción académica se articuló con los servicios a la comunidad y la amplia vinculación social. Se desarrollaron ámbitos que permitieron el encuentro entre intereses científicos y de la sociedad, tales como ferias, talleres, publicaciones, realizaciones audiovisuales, artículos, desarrollo de muestras, museos comunitarios, centros de interpretación, puesta en común de archivos documentales y colecciones científicas, proyectos de preservación y puesta en valor de sitios arqueológicos e históricos y circuitos patrimoniales turísticos.

Asimismo, el instituto colabora en el manejo de patrimonio de gran valor, ya que cuenta con acervo bibliográfico y documental donado por la familia del historiador Dr. Ramón Leoni Pinto, que conformó una biblioteca abierta y especializada en Ciencias Sociales. Además, el ISES aporta con recursos y curaduría para que sea posible la apertura, el conocimiento y manejo de la colección arqueológica y etnográfica del Instituto de Arqueología y Museo (IAM), uno de las más importantes colecciones del NOA, en la UNT. Otro aporte logrado con intermediación e impulso del instituto fue la conformación del LADI (Laboratorio de Digitalización), en donde se realizan tareas de limpieza, archivo y digitalización de calidad de documentos diversos y fotografías de colecciones de diferente origen. El Laboratorio de Cartografía Digital brinda también servicios de digitalización de imágenes y cartografías antiguas y su potenciación a través del uso de sistemas de información geográfica (SIG).

Otro laboratorio pionero en el NOA en el cual el ISES aporta recursos humanos, y de asistencia en equipamiento y mantenimiento edilicio es el Laboratorio de Arqueobotánica, dependiente también del IAM, donde se brindan servicios de procesamiento e identificación por microscopía, además de cursos y formación de recursos humanos de toda Latinoamérica y España.  Finalmente, se puede mencionar el apoyo que brinda en el desarrollo de dos revistas científicas en ciencia sociales de amplio impacto: Mundo de Antes y Travesía, ambas en colaboración entre la UNT y el CONICET.